Sabemos que los saltos de generación conllevan un guantazo gráfico tremendo. Todos recordamos lo que supuso el cambio de SNES a Nintendo 64 o la diferencia que nuestros ojos no podían creer entre Xbox y Xbox 360. En aquellas ocasiones sabíamos que estábamos delante de un videojuego, pero ahora hay un contendiente que lo pone en duda.
Author: @Juansf8, – Continúa leyendo en el sitio original de la noticia